lunes, 21 de noviembre de 2016

MY BLUEBERRY NIGHTS (2007) ESPECIALES

El AMOR y sus diferentes formas de querer incluyendo el desamor pero presentado a través de una deliciosa y apetecible tarta de arándanos templada, servida con un frío y correoso helado, ¿quién podría resistirse a esta tentación?.

El honkonés Wong Kar Wai nos ofrece uno de los relatos más románticos de nuestra era con un elenco de actores que en 2007 empezaban a despuntar y ahora son grandes estrellas de la gran pantalla, atractivos y sugerentes como en pocas ocasiones han estado, tan perfectos y bellos. Comenzaré por orden de preferencia en el film, Rachel Weisz, que aparece en el 2º acto de la película, con una belleza arrolladora y su papel, especialmente al limite, la convierten en una Liz Taylor moderna, pasada de vueltas, borracha y algo ligera en cuestión de amores, regalandonos todo un personajazo, Sue Lynne, una mujer sin rumbo fijo, atrapada en una ex relación más bien tormentosa pero llena de pasión, un desencuentro que no tiene solución, avocado a la destrucción pero al mismo tiempo imposible de olvidar. Su rostro es perfecto, su interpretación majestuosa, digna de museo, admirable y redentora, tanto que no volverás a verla con los mismos ojos. La elegancia la define y el relato la transforma en el segundo animal más bello del mundo...

Seguimos con Jude Law, no especialmente querido por mi pero si que mirando su filmografía, tiene grandes películas, no tanto actuaciones pero aquí nos sorprende con su papel más tierno y dulce, un bohemio soñador que sirve deliciosas tartas y amargos cafés a un sin fin de anónimos personajes que pasan a diario por su negocio y que van dejando parte de sus vidas e historias de amor y desamor en una pecera de trasparente cristal a modo de  colección de llaveros. Entrando en la 1ª parte del relato y cerrándolo de manera magistral quizás con el beso más bello que jamas se ha rodado, tan original, romántico y jugoso junto a una debutante y magnífica cantante Norah Jones, que siendo la protagonista es la menos brillante, pero ofreciendo un personaje camaleónico capaz de reinventarse tras un desencuentro amoroso, de los que suele dar la vida para termina probando la deliciosa tarta de arándanos que da titulo al filmy simboliza el amor perfecto. Ella forma parte de los 3 relatos como hilo conductor de estas historias limites que harán reaccionar a ese músculo tan importante y a la vez tan frágil que todos tenemos llamado corazón...


Y por ultimo, la que podría ser la gran triunfadora de este año, una no muy bella físicamente, que ya es raro, Natalie Portman, algo desaliñada pero un espiritu libre que aparece en el tercer acto del film, dándole y aportando al personaje de Norah Jones la vitalidad y el alma que necesitaba, ya que por miedos y temores varios, huye justo en dirección contraria a lo que podría ser el amor de su vida pero por escasa valentía y abundante fragilidad es incapaz de aceptar su destino. Es donde Leslie, una empedernida jugadora de timbas de póker ilegales que a través de una road movie nos presenta otra forma de amor, la de un padre a su hija o viceversa, que despreocupada y arriesgada sigue la estela de su progenitor, quien le enseñó el difícil y a la vez muy fácil arte de mentir y seducir a través de una baraja de naipes. Pesé a huir de esa atracción especialmente tóxica, al final, reconoce que dentro de ella existe el amor, a pesar de renunciar a cualquier sentimiento que no sea el de ganar a toda costa y demostrarse a si misma que un padre que ya olvidó sigue en ADN y que su amor es incondicional pero sin ningún tipo de remordimiento, aportándole a Lizzy la valentía y el coraje que necesitaba para finalmente a modo de epílogo enfrentarse al verdadero amor de su vida y sucumbir a sus irresistibles encantos entre dulces y golosas tartas de arándanos con un apetecible y cremoso helado cargado de AMOR, posíblemente el motor de nuestras vidas...

A nivel técnico destacar una espectacular fotografía que combina la oscuridad del mil veces retratado Nueva York y sus luminosos letreros de neón del café de Jeremy, a los ambientes más espesos del night club que regenta esa bellísima dama de negro con esa densa niebla asfixiante de los ambientes nocturnos para luego deslumbrarnos con el brillante sol y el colorido desierto de Las Vegas lleno de vida, alegría y despreocupación, ese world apart, que solo parece existir allí. Los planos del honkonés son especialmente bellos tanto cuando aguanta los primeros planos de los protagonistas como cuando se detiene en detalles del decorado mientras transcurre la narración, aportando un tono independiente, aristico y personal del que se alimenta el film. 

¿Qué es entonces My Blueberry Nights? Pues el Todo y el Nada, el Mucho pero con Poco, el Placer a través del Sufrimiento y la Belleza enfrentada al Desamor, una de las películas más románticas que puedes ver si eres capaz de vislumbrar el Todo que encierra esta maravilla disfrazada de apetecible tarta de arándanos. Disfrutenla amigos...

P.D. Os dejo con su BSO que esta llena de grandísimos temas, desde los más clásicos a los más actuales que formaran parte de uno mismo tras escucharlos, convirtiéndose en todo un himno emocional único y personal. Estas son mis preferidas: Cat Powers, la propia Norah Jones y el eterno e inolvidable Otis Redding...ENAMORAROS!!




NOTA PERSONAL: 9 **** EXCELENTE