viernes, 9 de febrero de 2018

YO, TONYA (2017)

Quién no recuerda los JJOO de Invierno de 1994 en Lillehammer (Noruega), pero no solo por el interés deportivo ni por las grandes marcas que se consiguieron sino porque fue portada de todos los periódicos e informativos de todo el mundo, la rivalidad de dos patinadoras sobre hielo acabó de la manera más ridícula y peliculera posible. Sus nombres Tonya Hardy y Nancy Kerrigan, una menos agraciada y la otra esculturalmente bella que ya de por si ya es desagradecido el mundo que con la presunta actuación de Tonya y sus secuaces elevó a la víctima a los altares compadeciendose de la pobre Nancy toda la humanidad que miraba absorta lo que acababa de producirse justo antes de empezar la competición.

Tonya Hardy empezó a destacar por su gran destreza con las cuchillas en el hielo, siendo la única mujer en conseguir el triple salto axel, encumbrando a esta pobre niña que cumplía perfectamente el sueño americano y a la que todos adoraban hasta que todo tiene un final y la fama es efímera, sus problemas personales hicieron mella en su trabajo y se la destronó con la misma facilidad que consiguió su corona.




Pues bien esta cinta nos cuenta eso, sus orígenes muy humildes en las competiciones en la que era rechazada constantemente por pertenecer a una clase inferior y por lo elitista de este deporte, confeccionándose sus propios los trajes, vista como una vulgar aficionada. A esto le sumamos una madre testaruda y terroríficamente exigente interpretada por la maravillosa y multipremiada actriz de comedia Allison Janney (Criadas y Señoras) consigue un brutal retrato de una América profunda llena de ironía y humor negro, en una especie de documental contado por los mismos protagonistas y a modo de flashbacks, iremos conociendo los detalles de esta rocambolesca historia de fracasados que ocurrió realmente aunque aderezada y algo manipulada para dar notoriedad al producto final.




Quizás ese tono grotesco y burlón hace que no se tome muy en serio al personaje, alejándose muy mucho del biopic tradicional, es lo que realmente se echa en falta, si la historia no fuera verídica seguramente funcionaría mucho mejor pero así queda lastrada por ese tono constante de parodia que si bien funcionó en otro desafortunado episodio deportivo en la lucha libre con Foxcatcher, en un tono más sombrío, aquí se acerca bastante pero queda demasiado caricaturesco.

Margot Robbie es la que da vida a la desgraciada Tonya que siempre fue de segundona y por la que nadie apostaba por ella, su dedicación y la estricta educción de su horrorosa madre la llevarían a cuotas inalcanzables y a tocar la fama con los dedos, pero esta fama es tan fugaz como irreal pronto se desvanecería y aparecería en escena otra nueva reina de América que desbancaría a Tonya y pondría en peligro su excelente rendimiento en las pistas de hielo, Nancy Kerrigan.



Como todos ya saben, esta atleta fue atacada por un desconocido con una barra de hierro lesionándola para así imposibilitar su participación en dichos JJOO y en beneficio aparentemente claro para su máxima rival a la cual recayeron todas las miradas. Lo que luego más tarde se demostró, todo fue un plan urdido por el descerebrado y poco inteligente marido que interpreta muy bien Sebastian Stan (Marte) y su orondo y torpe guardaespaldas y amigo, dos personajes salidos del mismísimo universo Fargo de los Coen, de ahí su poca credibilidad, perdiendo un poco la gracia ya que no creo que realmente fueran tan lerdos o quizás si.

Janney esta brutal y va encaminada a conseguir el Oscar, que aun le falta en su laureada carrera, ya que posee 5 Golden Globes y 4 Emmys, su rival más fuerte el Laurie Metcalf por Lady Bird pero este personaje es carne de Oscar total y creo que tras el triunfo de la primera sobre la otra en los Golden y en los Crititcs Choice, su Oscar esta casi asegurado. Margot en cambio se quedó sin premio y solo la nominación al Oscar podría ser la recompensa a un excelente trabajo que para mi gusto le quita credibilidad por su exquisita belleza jugando en contra del relato. Productora de la cinta Margot debería entrar en la terna finalista de actrices pero las plazas están muy caras este año en las mujeres.





El director es Craig Gillespie (La Hora Decisiva) un flojo director que nos brindó el peor remake de la historia con Noche de Miedo destrozando el clásico film de terror de los 80 y que aquí se quita el halo de comercialidad de sus anteriores y pobres cintas logrando destacar aquí con una producción más independiente e intimista que como dije roza el documental, en eso es brillante, aunque se hace un poco de lío en esos saltos en el tiempo posiblemente por un montaje algo ineficaz y demasiado abrupto en ocasiones.

La BSO esta llena de temas que todos podemos reconocer fácilmente ya que son parte de nuestra vida en algún momento de ella, aderezan muy bien al relato aportándole una divertida visión como comedia negra que es desde el The Passenger de Siouxsie and The Banshees a el Goodbye Stranger de Supertramp o el ochentero Gloria de Laura Branigan al rockero Barracuda de Heart, Fleetgood Man y su The Chain o el oscarizado Lose Yourself de Eminem y así un si fin más pero escogeré una obra maestra musical como es el Romeo and Juliet de los grandes Dire Straits. Disfruten del bochornoso espectáculo sobre hielo y barro que nos ofrece.

NOTA PERSONAL: 7 *** BUENA