domingo, 11 de septiembre de 2016

CEGADOS POR EL DESEO (CLOSER) 2004




















Existe la cuadratura del círculo pero la del triángulo hasta entonces no y es cuando el triángulo se vuelve cuadrado que los deseos pasan a ser descontrolados, Closer, es una treatralización de una sociedad que cada vez resulta más actual. Su estilo en los diálogos es perfecto, porque vemos secuencias y montaje detrás en la cinta sino creeríamos que estamos dentro de un teatro viendo esta obra del siglo XXI que afecta a lo más básico, al instinto de amar y ser amado, con todo lo que ello conlleva, celos, infidelidades, rupturas y decepción. Tiene todo los elementos de una tragicomedia pero moderna donde las risas y los llantos se mezclan sin ningún tipo de pudor, ahora ríes, luego lloras...

Cuatro personajes atractivos a más no poder, juegan al divertido juego del amor, dejándose seducir y siendo seducidos, irresistible no participar, imposible apartar la mirada, el deseo fluye entre ellos a la vez que el desencanto y las ganas de salir de las relaciones convencionales, asentadas y al mismo tiempo agotadas.

Cuatro bellos rostros que se dejan atrapar unos a otros estableciendo una red de autodestrucción que dinamitará todo lo que más ansiamos, el amor o deseo, corroyendolo todo como cal viva por unos enfermizos celos, fundados hay que decir, pero incapaces de aceptar que la vida cambia, y que lo que hoy es correcto, mañana puedes toparte con la perfección y así sucesívamente.

El humano esta lleno de imperfecciones y frustraciones descargándolas en los demás, llenándolo todo de basura sentimental que afectará a nuestras futuras o presentes relaciones, nunca sabremos que queremos, cuando das un paso que tan ansias, deseas poco más tarde volver atrás y recuperar lo perdido, nacimos ya con ese malvado don.



Nichols desnuda el alma de estos personajes despojándolos de todo, dejando sus pasiones al descubierto para que todos las veamos sin ningún pudor, su estilo es perfecto, puesto que al ser una obra de teatro, logra trasladar ese estilo narrativo de manera sublime y todo un especialista en seducción como ya demostró en una de sus más recordadas y celebres cintas El Graduado (1967). Su trabajo fue reconocido en los Globos de Oro con una nominación ya en el final de su carrera cosa que los Oscar no lo hicieron. Los diálogos son tan incisivos e hirientes que resultan ser todo un espectáculo gratificante en el que ves como se destruyen los cuatro y donde unos toman las riendas para después perderlas y tomarlas los otros, es un placer muy culpable del que todos alguna vez hemos sido participes pero es siempre mejor verlo como espectador que como protagonista.



Los cuatro actorazos son una delicia tanto visual como interpretativamente, para mi siempre lo fue y ahora sigue siéndolo tras este 2º revisionado Julia Roberts, su mejor papel y su serena belleza están en su punto más álgido, nuca estuvo tan bella. 

Portman, la más joven, cuyo rostro hipnotiza la cámara estuvo cerca de acariciar el Oscar pero el destino le guardaría lo que si es su mejor papel en Cisne Negro, consiguiendolo. 

Owen, quizás el personaje mas tosco y más desagradable pero acabas empatizando con él dando otra brutal interpretación que le valió la nominación al Oscar al igual que Portman perdiendo ambos contra Morgan Freeman en Million Dollar Baby y Catte Blanchet por El Aviador respectívamente .

Y por ultimo el más lánguido pero perfecto en su papel Law, jugando al despiste y el artífice intelectual de todo este embrolló aunque su debilidad es tan visible como su fuerte coraza.



En su día, 2004, la cinta resultó ser demasiado directa, una bofetada en la cara, quizás porque nadie quería reconocerse en estos personajes pero pasados 12 años la cinta es tan actual que parece escrita hoy, y también lo suficientemente adultos para aceptar esa realidad, vista en infinidad de ocasiones en amigos, familiares, conocidos, o incluso uno mismo.

Si American Beauty, también teatral, fue y es la degradación de una sociedad caduca, Closer lo es y quedará para los restos como la degradación de las relaciones personales de este nuevo siglo y seguiremos sin aprender, bien quedándonos solos para el resto de nuestra existencia o en pareja, aquella que es cómoda pero que nunca deseamos como la que dejamos escapar.

Su inicio y su final son tan bellos como tristes tanto por su realización a cámara lenta con una bellísima Portman caminado entre la multitud pero de distinta forma en ambas, tanto física como mental, todo ello acompañado por la melancolía de Damien Rice en lo que para mi es la mejor canción romántica que existe "The Blower´s Daughter", cuando la escuches nunca desaparecerá de tu cabeza para bien o para mal, liberándote de lo pesado o trayéndote recuerdos de lo pasado...



Y aunque este final es el perfecto tanto cinematográfico como musicalmente hablando no puedo dejar la ocasión de poner otro de mis temas favoritos que aparece en la escena más dura de la cinta en el club donde trabaja Portman y Owen va como cliente, sonando por detrás esta melodía de los Smiths, un grupo imprescindible para el que no lo conozca.




NOTA PERSONAL: 8 **** NOTABLE